Un buen amigo me dijo que la raíz de nuestra generosidad es egoísta. Él afirma que nosotros somos inconcientemente generosos para obtener una gratificación personal.
Yo le dije lo siguiente:
Primero que nada siempre debemos ser generosos sin pensarlo dos veces, hasta acostumbrarnos a ser generosos. Es cierto que la generosidad es egoísta, ¿cómo no va a ser egoísta, si nuestra existencia en esta vida está basada en nuestra noción de ego? Pero esto es sólo en un principio, después de acostumbrarnos a ser generosos podemos escalar las etapas hasta llegar a la Perfección de la Generosidad.
El Buda enseñó:
- Todas nuestras acciones son egoístas hasta que acabemos con nuestro ego.
- Todas nuestras acciones serán egoístas hasta que lleguemos al estado de paz absoluto que es nirvana.
- La Perfección de la Generosidad es un pilar fundamental para abandonar nuestro ego y llegar a nirvana.
Estas son las etapas que debemos escalar para obtener la Perfección de la Generosidad:
Etapa 1: Sensación de grandeza sobre los demás por lo generoso que somos.
Etapa 2: Sensación de felicidad en la alegría que los demás obtienen por nuestra generosidad.
Etapa 3: Estado de paz suficiente en el que podemos regalar una posesión que es verdaderamente nuestra, Ej. nuestro carro, nuestra cama o nuestra casa.
Etapa 4: Estado de paz en el que nuestro ego está apaciguado, por ende no necesita absolutamente nada.
Etapa 5: Estado de paz en el que nuestro ego se desvaneció y sólo vivimos para el bien de los necesitados. Ej. Madre Teresa de Calcuta.
No tiene nada de malo que la generosidad gratifique en un principio, pero la idea es encausar esa gratificación. Siempre debemos medir con concentración que nuestra intención de ser generosos sea primordialmente disminuir nuestro apego al ego. Sólo con esta concentración podemos escalar las etapas hasta llegar a la Perfección de la Generosidad para así abandonar nuestro ego y llegar a nirvana.
OM TARE TUTARE TURE SOHA
Yo le dije lo siguiente:
Primero que nada siempre debemos ser generosos sin pensarlo dos veces, hasta acostumbrarnos a ser generosos. Es cierto que la generosidad es egoísta, ¿cómo no va a ser egoísta, si nuestra existencia en esta vida está basada en nuestra noción de ego? Pero esto es sólo en un principio, después de acostumbrarnos a ser generosos podemos escalar las etapas hasta llegar a la Perfección de la Generosidad.
El Buda enseñó:
- Todas nuestras acciones son egoístas hasta que acabemos con nuestro ego.
- Todas nuestras acciones serán egoístas hasta que lleguemos al estado de paz absoluto que es nirvana.
- La Perfección de la Generosidad es un pilar fundamental para abandonar nuestro ego y llegar a nirvana.
Estas son las etapas que debemos escalar para obtener la Perfección de la Generosidad:
Etapa 1: Sensación de grandeza sobre los demás por lo generoso que somos.
Etapa 2: Sensación de felicidad en la alegría que los demás obtienen por nuestra generosidad.
Etapa 3: Estado de paz suficiente en el que podemos regalar una posesión que es verdaderamente nuestra, Ej. nuestro carro, nuestra cama o nuestra casa.
Etapa 4: Estado de paz en el que nuestro ego está apaciguado, por ende no necesita absolutamente nada.
Etapa 5: Estado de paz en el que nuestro ego se desvaneció y sólo vivimos para el bien de los necesitados. Ej. Madre Teresa de Calcuta.
No tiene nada de malo que la generosidad gratifique en un principio, pero la idea es encausar esa gratificación. Siempre debemos medir con concentración que nuestra intención de ser generosos sea primordialmente disminuir nuestro apego al ego. Sólo con esta concentración podemos escalar las etapas hasta llegar a la Perfección de la Generosidad para así abandonar nuestro ego y llegar a nirvana.
OM TARE TUTARE TURE SOHA
2 comentarios:
Para mí es otro nivel! y no sé si todos podemos elevarnos hasta ahí
Sí nos podemos elevar! Si no es en esta vida será en la próxima, pero hay que empezar ahora mismo.
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